top of page

La felicidad es GRATIS

Recientemente me topé con un artículo que explicaba cómo está cambiando el significado de ser próspero. Aunque la prosperidad es algo que todos buscamos en la sociedad, parece ser que cuando se le pregunta a la gente qué es o cómo se logra, en realidad no muchos saben cómo responder. Donde quiera que vamos, los medios de comunicación tratan de convencernos de que para ser felices e importantes, es necesario que tengamos o compremos productos o bienes, o luzcamos de una manera particular que hará que le agradecemos a los demás.

Sin embargo, existen investigaciones que han demostrado que la teoría "felicidad = dinero" es falsa. Las tendencias recientes que muestran el rechazo de las generaciones más jóvenes a ser dueños de viviendas y/o automóviles, sugieren que la humanidad está buscando un significado y relaciones más profundas y valiosas que la mera acumulación de objetos/posesiones.

La felicidad es GRATIS

¿Has escuchado la expresión “el dinero no puede comprar la felicidad”?

Estas son algunas razones por las cuales el dinero no es igual a la felicidad:

  1. El dinero no compra el tiempo: Muchas personas adineradas pasan la mayoría de su vida trabajando en exceso. Cuando no están trabajando, están tratando de averiguar qué hacer con su dinero. ¿Deberían guardarlo, gastarlo o invertirlo? A menudo esta preocupación consume gran parte de su tiempo, tanto que no se detienen a disfrutar de los placeres de la vida.

  2. El dinero nunca será suficiente: Otra razón por la cual el dinero no compra la felicidad es que, no importa lo mucho que tengas, nunca será suficiente. Puedes pensar que serás feliz cuando compres una segunda casa o aquel carro que siempre has soñado tener; sí, el dinero puede comprar todos los productos que deseas o necesitas, pero una vez que los tengas, desearás tener más. El apetito por más no se detendrá. Y tu insatisfacción seguirá intacta.

  3. El dinero no compra una vida sin preocupaciones: Muchas personas piensan que el dinero hace la vida más fácil, pero en realidad complica bastante las cosas. Junto con la riqueza viene el temor de que la gente solo quiere estar cerca de ti por tu dinero. Incluso si esto no fuera cierto, siempre será un pensamiento que revoloteará en tu cabeza, difícil de disipar.

Ciertamente, el dinero puede hacer nuestra vida mucho más fácil, pero la verdadera prosperidad no está definida por el tamaño de nuestra cuenta bancaria, pues viene del ser y no del tener.

Entradas relacionadas

Ver todo
Entradas relacionadas
bottom of page